miércoles, 24 de marzo de 2010

UN RELATO SOBRE AMOR

13:39

Se trata de dos hermosos jóvenes que se pusieron de novios cuando ella tenía trece y él dieciocho. Vivían en
un pueblito de leñadores situado al lado de una montaña. Él era alto, esbelto y musculoso, dado que había
aprendido a ser leñador desde la infancia. Ella era rubia, de pelo muy largo, tanto que le llegaba hasta la
cintura; tenía los ojos celestes, hermosos y maravillosos..
La historia cuenta que habían noviado con la complicidad de todo el pueblo. Hasta que un día, cuando ella tuvo
dieciocho y él veintitrés, el pueblo entero se puso de acuerdo para ayudar a que ambos se casaran.
Les regalaron una cabaña, con una parcela de árboles para que él pudiera trabajar como leñador. Después de
casarse se fueron a vivir allí para la alegría de todos, de ellos, de su familia y del pueblo, que tanto había
ayudado en esa relación.
Y vivieron allí durante todos los días de un invierno, un verano, una primavera y un otoño, disfrutando mucho
de estar juntos. Cuando el día del primer aniversario se acercaba, ella sintió que debía hacer algo para
demostrarle a él su profundo amor. Pensó hacerle un regalo que significara esto. Un hacha nueva relacionaría
todo con el trabajo; un pulóver tejido tampoco la convencía, pues ya le había tejido pulóveres en otras
oportunidades; una comida no era suficiente agasajo...
Decidió bajar al pueblo para ver qué podía encontrar allí y empezó a caminar por las calles. Sin embargo, por
mucho que caminara no encontraba nada que fuera tan importante y que ella pudiera comprar con las
monedas que, semanas antes, había ido guardando de los vueltos de las compras pensando que se acercaba
la fecha del aniversario.
Al pasar por una joyería, la única del pueblo, vio una hermosa cadena de oro expuesta en la vidriera. Entonces
recordó que había un solo objeto material que él adoraba verdaderamente, que él consideraba valioso. Se
trataba de un reloj de oro que su abuelo le había regalado antes de morir. Desde chico, él guardaba ese reloj
en un estuche de gamuza, que dejaba siempre al lado de su cama. Todas las noches abría la mesita de luz,
sacaba del sobre de gamuza aquel reloj, lo lustraba, le daba un poquito de cuerda, se quedaba escuchándolo
hasta que la cuerda se terminaba, lo volvía a lustrar, lo acariciaba un rato y lo guardaba nuevamente en el
estuche.
Ella pensó: "Que maravilloso regalo sería esta cadena de oro para aquel reloj." Entró a preguntar cuánto valía
y, ante la respuesta, una angustia la tomó por sorpresa. Era mucho más dinero del que ella había imaginado,
mucho más de lo que ella había podido juntar. Hubiera tenido que esperar tres aniversarios más para poder
comprárselo. Pero ella no podía esperar tanto.
Salió del pueblo un poco triste, pensando qué hacer para conseguir el dinero necesario para esto. Entonces
pensó en trabajar, pero no sabía cómo; y pensó y pensó, hasta que, al pasar por la única peluquería del
pueblo, se encontró con un cartel que decía: "Se compra pelo natural". Y como ella tenía ese pelo rubio, que no
se había cortado desde que tenía diez años, no tardó en entrar a preguntar.
El dinero que le ofrecían alcanzaba para comprar la cadena de oro y todavía sobraba para una caja donde
guardar la cadena y el reloj. No dudó. Le dijo a la peluquera:
- Si dentro de tres días regreso para venderle mi pelo, ¿usted me lo compraría?
- Seguro - fue la respuesta.
- Entonces en tres días estaré aquí.
Regresó a la joyería, dejó reservada la cadena y volvió a su casa. No dijo nada.
El día del aniversario, ellos dos se abrazaron un poquito más fuerte que de costumbre. Luego, él se fue a
trabajar y ella bajó al pueblo.
Se hizo cortar el pelo bien corto y, luego de tomar el dinero, se dirigió a la joyería. Compró allí la cadena de oro
y la caja de madera. Cuando llegó a su
casa, cocinó y esperó que se hiciera la tarde, momento en que él solía regresar.
A diferencia de otras veces, que iluminaba la casa cuando él llegaba, esta vez ella bajó las luces, puso sólo dos
velas y se colocó un pañuelo en la cabeza. Porque él también amaba su pelo y ella no quería que él se diera
cuenta de que se lo había cortado. Ya habría tiempo después para explicárselo.
Él llegó. Se abrazaron muy fuerte y se dijeron lo mucho que se querían. Entonces, ella sacó de debajo de la
mesa la caja de madera que contenía la cadena de oro para el reloj. Y él fue hasta el ropero y extrajo de allí
una caja muy grande que le había traído mientras ella no estaba. La caja contenía dos enormes peinetones
que él había comprado... vendiendo el reloj de oro del abuelo.
Si ustedes creen que el amor es sacrificio, por favor, no se olviden de esta historia. El amor no está en nosotros
para sacrificarse por el otro, sino para disfrutar de su existencia.

lunes, 22 de marzo de 2010

Detroit Metal City

17:50




Soichi Negishi es un hombre tímido y amable que sueña con una carrera como cantante de música pop sueca. Los sueños no pagan las facturas, así que terminó como el cantante y guitarrista de una banda de death metal llamada "Detroit Metal City." En el estadio es Johannes Krauser II, se rumora que es un demonio del infierno del terrorismo, que ha matado y violado a sus padres, etc, etc Negishi desprecia todo lo que DMC significa, pero también lo ayuda, él es un artista fabuloso y no puede caminar lejos de eso. Como estrella de DMC Negishi trata de satisfacer ambos mundos, el de sus verdaderos gustos y pasiones en el que además trata de conquistar a la chica que le gusta y el mundo del death metal.

Divertida y sin complejos!!! para reirse del pop y de las exageraciones del metal!!!

martes, 9 de marzo de 2010

Nuevos Horizontes!!!

23:51

Aprendiendo de todo el mundo y abriendo mis horizontes!

Ya nada importa, estoy realmente bien!!!